Victorias de ÑuÑu

Dios lo bendiga Doctor Jorge Diaz Walker,

le escribo en nombre de mi familia, mi 

esposa Ana María y nuestro amado hijo

Sebastian, y nos gustaría mucho que 

permita que vayamos a visitarlo para 

expresarle todo nuestro agradecimiento

y respeto hacia usted.

Le debemos la buenísima salud que siempre 

tuvo y tiene nuestro hijo que ahora tiene 25 sños

y que, gracias a sus magistrales enseñanzas,

NO TUVO NINGUNA DE LAS ENFERMEDADES

DE LA INFANCIA, y sigue hasta hoy sin saber lo 

que es tener que visitar un médico por problemas

de salud.

Cuando usted atendía a nuestro hijo, teníamos 

una heladería en San Andrés, para que nos recuerde

nuestro hijo es adoptivo, y el primer y único médico

que lo atendió desde que los recibimos cuando tenía

un día de nacido fué usted (Dios nos guió para encontralo)

Usted le enseñó a mi esposa a amamantarlo

con el relactador hasta que ella, madre adoptiva,

empezó a amamantarlo con su propia leche, milagro

que en Noruega  llamó mucho la atención lo que motivó 

que enviaran unos periodistas para ver en persona lo que 

usted hacía en Ñu Ñu y cuando estuvieron entre nosotros,

el único bebé adoptivo que estaba siendo amamantado

era el nuestro y elaboraron un artículo del que todavía

tenemos una copia que usted nos dio tan gentilmente.

Tenemos entendido que a resultas de ese reportaje

que tuvo honda repercusión en ese país del norte

Ñu Ñu recibió una donación importante, y disculpe

que mencionemos estos sucesos, solo lo hacemos

para refrescar su memoria, seguros como estamos

de que va a ser difícil que usted se acuerde de un bebito

al que le regaló una larga vida llena de salud y de

sus agradecidos padres.

Nuestro hijo está de vacaciones estos días y hace

mucho que es un ferviente deseo de la familia el 

de visitarlo para expresarle toda nuestra admiración,

respeto y agradecimiento, mi hijo principalmente quiere

agradecerle personalmente todo lo que recibió.

Ya hablamos por teléfono con su secretaria y

el próximo lunes 14 estaremos alli cerca de las

14 horas, antes de que empiece su consulta, esperamos

que tenga un momento para recibirnos y que

nos ofrezca la oportunidad de saludarlo

con el hondo amor y agradecimiento que le

tenemos.

Lo saludamos, gracias por todo.

​Oscar Perone, Ana María Janulik y Sebastian Perone.

Jorge W. Díaz Walker desde Florida Vicente López – Abril 2014

Maternidad

Entonces supo que ella estaba allí. El aroma de su cuerpo fue penetrando en su conciencia.

Como tantas otras tardes, corrió a arrodillarse ante su silenciosa figura, pero esta vez sintió que algo había cambiado. El tiempo de hablar y de esperar había terminado. Hoy todo seria diferente. Ella no era la misma. Se atrevió a poner sus manos en su rostro, en su cuello, en sus pechos, en sus caderas. Algo había cambiado en su cuerpo, era más fuerte, mas firme. Beso sus labios, pero ella permaneció inmóvil y, por un instante, el tuvo mucho miedo. Se armo de valor y se tumbo a su lado.

Era granjero y en su vida había arado muchos acres de fértil tierra negra.

Estaba seguro de si mismo.

Estaba surcando su cuerpo profundamente.

Estaba plantando las semillas de un niño en la calida y fértil tierra.

Las semillas de su hijo fueron creciendo en sus entrañas.

En las noches de invierno, ella salía a caminar por un sendero que discurría por la falda de una pequeña colina y desde allí se iba a ordeñar vacas en un establo. Era grande y fuerte. Sus piernas se desplazaban de un lado a otro, al igual que el niño que llevaba en sus entrañas.

Aprendió el ritmo de las pequeñas colinas.

Aprendió el ritmo de las llanuras.

Aprendió el ritmo de las piernas al andar.

Aprendió el ritmo de las manos ordeñando las ubres de las vacas.

Un solo niño en sus entrañas. Se metió en la cama y sintió sus pies dando patadas. Permaneció inmóvil, escuchando. Una pequeña voz parecía llegar hasta ella en el manto de silencio que cubría la noche.

V.O Campo  – 4/04/2014 Desde ADN La Nación

Jorge Washington Díaz Walker desde Florida Vicente López por ÑuÑu

“Ya no sos mas mi Kepina, ahora…” te dicen foulard…

En fines de julio del 2014, Ñuñu cumple 40 años recuperando la cultura del amamantamiento que desde los deseos de las madres participantes recuperaron la Kepina, en la lengua kolla, cultura de nuestro origen andino precolombino, servia para identificar “pañuelos o mantas” destinados a portar crías creando, simultáneamente a otras ancestrales culturas humanas, la bolsa marsupial negada por la evolución a los humanos también marsupiales por el nacimiento anticipado de 36 meses de sus crías. Fue Alicia, aymará de Bolivia, quien con buen criterio propuso el uso delantero del Sawayo (kepina aymará) y no sobre las espaldas, iniciadas desde  niños y niñas en su cultura.

Y así establecimos una continuidad en las caricias y ternuras necesarias para finalizar el acabado de aquel parido anticipadamente (Platón siglo IV ac)

Desde los 40 de Ñuñu

Abril 2014

JW Diaz Walker, Florida de Vicente Lopez

Leerlo con tonada cordobesa

El Papa y Amamantar, UMBRAL para el HAMBRE CER000 22/12/2014

Mas allá de creencias religiosas, el Papa Francisco gusta, es un Papa diferente, cercano a la gente, humilde, simple, humano. Uno de sus últimos gestos de resaltar fue que animo a una madre a amamantar  en público.

Mientras mucha gente se horroriza por ver algo tan natural y normal como una madre alimente a su bebe en publico el Papa lo fomenta.

En un reportaje al periódico italiano La Stampa, el Papa mostró su apoyo a las madres, diciendo que no deben sentirse avergonzadas de dar de mamar en publico “cuenta a continuación una anécdota sucedida durante su audiencia general de los días miércoles.

Al acercarse a la barrera vio a una madre con una beba de pocos meses en brazos que esta llorando.

Ella lo acariciaba, el papa le dijo: Escuche señora creo que la niña tiene hambre. La madre le contestó “A cosi hambre seguramente, es su hora de comer. El Papa le respondió, “A cosi por favor déle algo para comer. La mujer era tímida y le daba vergüenza amamantar en publico mientras el Papa pasaba dijo “Lo mismo que le dije a esa mujer se lo dijo a la humanidad, acérquenle a la gente algo para comer.”

Esa mujer tenía leche para alimentar a su hijo, nosotros tenemos suficiente comida en el mundo para alimentar a todas las personas.

Jorge W. Diaz Walker

Desde Ñuñu, Florida - Vicente Lopez, Argentina, abril 2014.-

FeriaVerdeAdrogue 5 de Abril!!!

Estaremos ahí aunque truene con nuestros libros

Saberes y sabores