Al
principio cuando empezábamos a organizarnos como grupo, surgió el problema de
consejos contradictorios en el destete del pecho. La gran mayoría de la gente
consideraba la edad de 6 meses como la adecuada para el destete del pecho,
aunque algunos dijeron 9 meses o mucho más y otros insistieron que dar el pecho
después de las seis semanas no tenía sentido.
Decidimos
observar y escuchar a nuestros bebés y concentrarnos en mantenerlos felices,
puesto que nunca podríamos satisfacer a toda aquella gente con opiniones
diferentes. El resultado fue que algunos de nuestros bebés habían tenido
bastante alrededor del año, algunos tenían tres años o más, pero la mayoría
rechazaron solos el pecho cuando tenían más o menos 18 meses.
Esperamos
que tú puedas aprender, como lo intentamos nosotras, a escuchar a tu bebé antes
todo. Es una buena idea hablar de esto con tu marido. El destete es un asunto
familiar, y, como muchos asuntos relacionados con el cuidado de tu bebé,
debería encajar con el modo general de enfocar el problema, tuyo y de tu
marido, de ser padres y de estar de acuerdo en que la norma para juzgar lo que
debemos hacer es que buscamos lo que es mejor para nuestros bebés y no importa
lo que piensen los otros que deberíamos hacer, porque nosotros pensamos que
amamantar no es sólo un modo de nutrir sino un modo de vivir libremente y por
sí mismos, en la que el hijo es satisfecho emocionalmente en sus necesidades
solo amamantándolo, entonces es difícil comprender porqué debemos establecer
una edad fija para que este modo de vida deba interrumpirse cuando nos dicen y
no cuando deba ocurrir, sea la edad que sea, porque la independencia, y no la
dependencia es el rasgo del amamantado que se desteta por decisión acordada con
su madre y su pade, en una atmósfera de comprensión.
Durante
varios meses mamá amamantó al bebé tantas veces como lo necesitara. Y con el
alimento le dio su calor, su cariño. Pero el tiempo pasa y el bebé puede
apartar sus ojos de su madre. Ahora comienza a mirar el mundo exterior, a intentar
conocerlo. Está en condiciones de llevar objetos a la boca y de explorar otros
alimentos. Poco a poco abandonará la lactancia y de esa manera habrá iniciado
el destete.
El
amamantamiento y la lactancia humana son hechos naturales y culturales. En el destete
humano se unen lo natural y lo cultural. Por esto es que en diferentes culturas
los niños destetan a distintas edades.
Por otra
parte el destete es la iniciación de la separación entre la mamá y el bebé,
después del nacimiento, y si el chico incorpora bien el alimento-afecto que
recibió, está en mejores condiciones de alejarse de mamá. Lo importante es que
el destete no sea violento y responda coherentemente a la necesidad de
separarse, tanto de la madre como del hijo. Pues de esa separación dependen
otros “alejamientos”, que en el futuro ayudan al chico en su crecimiento y
desarrollo. Por algo nuestro idioma registra como sentido figurado de la
palabra destetar: “apartar a los hijos del regalo y mimo del hogar”.
EN ESTE
PROCESO PUEDEN PRODUCIRSE AVANCES Y RETROCESOS, HASTA LLEGAR AL ABANDONO TOTAL
DEL AMAMANTAMIENTO. EL BEBE NECESITA SU TIEMPO Y NO SE LE PUEDE IMPONER UN
RITMO.
El destete
consiste en el reemplazo de mamadas por los alimentos de la familia. Es el
desarrollo del amamantamiento hacia la alimentación del adulto familiar.
No es el
cambio de lactancia materna por bovina, es el dejar la leche. El bebé
alimentado exclusivamente con leche materna abandona ese alimento
paulatinamente para participar en la mesa familiar. “Comer” no significa solamente
nutrir. Tiene, además, un contenido afectivo y social. El bebé abandona el
pecho materno para compartir con los padres y hermanos la mesa y las comidas de
la familia y sólo ingerirá lácteos de otras especies cuando ellos se hallen
incluidos en el menú familiar, los lácteos bovinos no serán nunca la base de la
alimentación, por el riesgo potencial de su consumo como desencadenante de moco
– catarro – otitis – bronquiolitis – alergias, propiciadores de hipertensión y
principal fuente de colesterol para su depósito en las arterias.
Es conveniente que la oferta de las comidas
familiares no se inicie antes de los 6 meses. La leche materna tiene todo lo que él precisa
y no es necesario incorporar alimentos tempranamente. La introducción precoz de
alimentos en la dieta del lactante resulta de la competencia de las madres
entre sí, de los pediatras entre sí y de los pediatras y las madres entre sí,
amparados por el manto de la presión consumista de la industria de los
sucedáneos de la lactancia humana.
Mascar,
masticar, masticar y tragar. Desde la primera tetada el niño no chupa para
sacar leche del seno sino para llevar el pezón hacia el tras de su paladar,
ubicado este ahí inicia el mascar que provocará en el seno la salida de
chorritos lácteos (eyección hormonal láctea producida por la … hormona del
amor), a este mascar sumara el masticar los objetos a su alcance en una
exploración oral, que madurará arriba de los 12 meses y a este masticar
agregará la deglución entre 18 y 24 meses, fin de la gestación extrauterina.
La parición
marca el inicio de la libertad en la cría humana. En Guatemala las matronas
entierran la placenta y cordón para que made e hijo puedan irse y SER (ser,
existir y vivir tienen la misma raíz etimológica).
En el útero
el cordón umbilical oxigena y nutre a la cría, su separación significa muerte.
Fuera del útero el amamantamiento reemplazo al cordón umbilical, pero acá la
separación no significa muerte sino el inicio hacia la libertad del si mismo.
La
maduración de los procesos digestivos y evolución del mascar al mascar y
masticar, se inicia a los 6 meses, no antes, y a veces después, por eso hay que
respetar al niño que se resiste a introducir alimentos en su dieta, puesto que
este coincide con intolerancias a ellos. Ej, la complitud de sus necesidades
nutricias son cubiertas por el amamantamiento.
A los 6
meses el niño presenta un desarrollo que le permite mantener la cabeza erguida
más allá del tiempo que lleva una comida. Como ha iniciado la etapa de
personalización, ya se siente frente a mamá como alguien distinto. Comienza a
conocer los objetos y trata de llevarlos a la boca para conocerlo más. Es
probable que tenga algún diente y quiere morderlos. Los músculos de la boca han
madurado y acepta alimentos porque está en condiciones de explorarlos.
Debes saber
también que no es necesario destetar al bebé si estas embarazada, a veces el
bebé dejará gradualmente de amamantar y si eso no ocurre, amamantar en tanda al
en el embarazo y al recién nacido y sus hermanos es posible y no significa
riesgos para nadie.
Si trabajas
y la situación económica de la familia lo permite, es conveniente que procures
una licencia de 6 meses o más. Al cabo de ese tiempo el bebé podrá esperarte,
tú habrás conservado el empleo y podrás retornar a tus tareas plenamente.
Cuando esto
no es posible y debes volver al trabajo, nuestra deficiente legislación laboral
contempla que dispongas de una hora diaria para dar el pecho al bebé. Una hora
no es suficiente, pero puede ayudar para que cuando estés en casa sigas amamantando
al bebé. Es importante que tú, mamá, no des nunca el biberón a tu bebé. Otra
persona se encargará de alimentarlo cuando tú estás ausente de tu casa. De esta
manera preservarás la imagen de mama-pecho en la percepción y afecto del niño.
Si faltas
pocas horas de casa, verás que muy frecuentemente te esperará, a veces conviene
dejar igual preparado un biberón para calmar la ansiedad… de quien esté
cuidando al bebé. Trata de que sea con tu propia leche, conviene que te ordeñes
manualmente después que el bebé ha mamado (tal como muestran los esquemas en
nuestras ñuñufichas) o también con la botella extractora, pero nunca con el
sacaleches común de perita, porque sólo conseguirá agrietarte los pezones.
Recuerda no guardarla en envases de vidrio, pues la degrada; guárdala en
recipientes de plástico, ¿cuánto tiempo? Puede estar 48 hs. al sol, calcula lo
que puede durar en heladera común (y consulta en “como amamanto y me la
banco”).
Si el niño
ya tiene 6 meses, puedes dejarle algunos alimentos sólidos, no es necesario
dejar un biberón. Pero si es más pequeño y vas a estar muchas horas fuera de
casa, no te preocupes, eso no significa que tengas que destetarlo; muchas mamás
del grupo han amamantado años, trabajando 10 horas fuera de calla, ellas
trataban de vaciarse los pechos en su trabajo para no tener congestiones y
dejaban el biberón con su leche o si no alcanzaban a ordeñarse tanto canapés
para estimular si masticación. Pero recuerda cuando tú estás en casa, porque
hoy no trabajaste o porque es fin de semana; siempre dale pecho y comparte tu
comida familiar.
Otra duda
de muchas mamás suele ser: “dentro de 10 días tengo que volver a mi trabajo,
¿lo voy destetando ya para que se vaya acostumbrando? Nuestra experiencia nos
dice que no; dale todo el pecho que puedas, siempre que puedas, si la persona
que lo cuida lo hace con amor, aprenderá a aceptar de ellos los otros
alimentos, cuando tú no estés, en su sensatez estará no darle al niño un
biberón lleno, 10 minutos antes de tu regreso y aunque esto suceda alguna vez,
tu hijo igual te reclamará por tu vínculo y tu regazo.
El destete no es algo repentino que se puede
hacer de un día para el otro. Empieza con la incorporación del bebé a las comidas de la familia,
durante las cuales él explora los nuevos alimentos. Tú, mamá, mientras tanto
continuarás dando el pecho tantas veces como lo creas necesario. Incluso en el
almuerzo o la cena.
En este
proceso pueden producirse avances o retrocesos, hasta culminar con el abandono
total del amamantamiento años más tarde. Las necesidades de crecer del niño y
de la madre son en realidad, las que determinan el “ritmo” en que se produce el
destete, crecer es alejarse.
Sienta al
bebé en tu regazo para hacerlo participar de la comida familiar. Ahora es
necesario que él conozca los alimentos. Debe tocar y comer lo que pueda con sus
manos. No olvides que las manos son las precursoras de toda herramienta, entre
ellos los cubiertos, y que de un libre juego surgirá el sentido de sus usos.
Cuando le ofreces la comida, él la aceptará. Entonces empieza a chuparlo y dar
vueltas el alimento dentro de la boca, a conocerlo por el tacto oral. Hay que
respetar su tiempo y esperar pacientemente a que el chico quiera incorporar
otro bocado. Su capacidad de masticar suele no estar bien desarrollada hasta el
noveno mes o más. El bebé necesita tomarse su tiempo y es inadecuado imponerle
el ritmo del adulto. Debes tener en cuenta que estando amamantando, la
introducción de los alimentos familiares es para el aprendizaje del bebe y solo
accesoriamente tienen algun valor nutritivo. Por ello sólo excepcionalmente
debe comer antes o después de los encuentros familiares al lado de la mesa,
puesto que otras preocupaciones surgirán a la madre, que terminan por caer en
las rápidas, insuficientes y peligrosas papillas y purés.-
Se
incorporan las comidas habituales de la familia, que el chico pueda ingerir de
acuerdo a su edad: fideos, capelletis, ñoquis u otras no picantes, huevos,
budines de verdura, etc. estará en condiciones de comer.
En cambio
se considera inconveniente los alimentos licuados, los purés, las sopas y las
papillas. En realidad no tienen mucho valor nutritivo e interfieren etapas
alimentarias importantes como el masticar y tragar. Las papillas y cereales
solo le proveen exceso de hidratos de carbono, que pueden convertirlo en un
obeso tempranamente.
Con
respecto a la leche vacuna no es conveniente como alimento principal, y solo
cuando se halle incorporada en el menú familiar como excepcional opción recurso
de cocina.
El
encargado de determinar la cantidad y duración de las comidas es el niño. Los
adultos deben cuidarse de no ofrecerle cantidades grandes de alimentos que los
desalienten en su nueva tarea, sirve poco, por ejemplo: 2 o 3 fideos.
Como el
destete es un hecho culturalmente condicionado, el momento oportuno para
llevarlo a cabo difiere notablemente en las diversas culturas. Los chinos y
japoneses realizan el destete total a los 3 años y nunca mas toman leche. Los […]
destetan a los 12 años.
Nuestra
cultura propone a que el proceso de destete terminase definitivamente entre los
9 y los 16 meses, periodo que vemos se va prolongando, actualmente en nuestro
grupo los destetes ocurren entre los 15 y 24 meses o mas. Lo importante es que
se realice cuando la mama y el bebe lo decidan.
De esta
manera resultará mas fácil y no será vivido como una perdida dolorosa, como ya
dijimos se trata de lograr un destete no violento, que responda a la necesidad
de separación gradual de la madre como del niño. Para esto es conveniente
explicarle al chico con las palabras y gestos adecuados que le esta ocurriendo
e intentar que sienta que perder la lactancia es compensado por la alegría que
produce en el mismo y en su familia el desarrollo y sus logros.
El niño
propone un destete alrededor de los 24 meses, momento al que debes estar atenta
para realizarlo, generalmente las señales son una falta abrupta de solicitudes
de pecho o de negarse a recibirlo. Si esto ocurre antes de lo que tu te habías
propuesto, debes aceptar esta propuesta por desgarrante que sea, ya que tu capacidad
de frustración es infinitamente mayor que la de tu hijo.
El padre y
la comparsa familiar, abuelos, tíos, primos y amigos, que quizá en el inicio de
la lactancia brinda actitudes contradictorias con respecto al amamantamiento,
se opone al destete, sutilmente escudado en “pobrecito”, “es chiquito”, o
urgido por la necesidad de calmarlo.
El medio,
que suele admitir sin mayores inconvenientes el chupete o biberón hasta la edad
escolar, se lanza con inusitada violencia contra el niño de mas de un año que
amamanta, con exclamaciones no tan sutiles: “tu leche no sirve para nada”, “te
usa de chupete”, “no te sale nada”, “no se te va a despegar mas”, “¿y el
Edipo?”. Por eso muchas mamas acuden con la pregunta: “¿hasta cuando puedo
darle de mamar?”, pues la suelen asaltar dos temores: uno, que su leche ya no
sirva, y en cambio sea necesario cambiarla por la bovina. Las respuestas que
nosotras, como mamas amigas de ñuñu damos, es la que comentamos acerca de que
la leche de madre siempre es buena, que la leche de vaca es para el ternero y
no debe nunca suplir ni complementar a la materna, ni ser su continuidad cuando
se haya realizado el destete. El otro temor, esta fundado muchas veces en la
lectura pseudociatifica del aspecto psicológico del destete, tal como es
encarado en las revistas femeninas, o en algunos artículos de divulgación que a
pesar de la buna voluntad se basan muchas veces
en concepciones antiguas y rígidas, cuando no, en puntos de vista
estrictamente personales. La madre teme entonces hacerle psicológicamente mal a
su hijo si el destete se prolonga hasta el 2º año de vida o mas, por el
contrario… cada vez hay mayores datos científicos para pensar en prolongar el
amamantamiento hasta los 24 meses. Aportan para la lactancia materna en
el segundo año de vida exhaustivos estudios de la afectividad en
amamantamientos prolongados qu señalan un aumento destacable de autoconfianza
que posibilita mayores adquisiciones en el aprendizaje, las necesidades de
inmunoglobulina y ferritina para las defensas del niño en el segundo año de
vida, solo pueden ser cubiertas por la lactancia materna.
En nuestros
encuentros supo haber algunas veces sub-grupos de destete pero se fueron
disolviendo, las mamas no acudían porque el tema las angustiaba mucho, es que
aun no estaban ni ellas ni sus bebes preparados para iniciarlo. Solo iban
presionadas como ya dijimos, por el que dirán y por sus propios temores. Cuando
las mamas lideres les informaban que el destete es un hecho que deben decidir
en común madre e hijo, y también el papa, y que no hay una fecha fija como
tope, se tranquilizaban, bajaba el nivel de ansiedad, y mas adelante, el
destete se daba como un hecho mucho mas natural.
Hay hechos
que a veces por mal asesoramiento pueden provocar destetes antes de tiempo: 1)
la madre que tomando algún tipo de medicamento, y por temor a que le haga daño
al bebe suspende la lactancia, infórmate bien, porque solo poquísimas drogas
están realmente contraindicadas en la lactancia. 2) cuando ha habido grietas
serias en el pezón y sangran, temen, erróneamente, que eso dañe al bebe. 3)
cuando ya se ha iniciado alimentación complementaria de biberón y se esta perdiendo
la lactancia, o por alguna circunstancia grave de separación madre-hijo,
incluso ya se la ha perdido, en esos casos es necesario el uso del Recuperador Lácteo
Materno (que usan también las mamas adoptivas, consulta las ñuñufichas del tema)
y en una semana a mas tardar, habrás recuperado normalmente la lactancia. 4)
cuando ocurren desgracias familiares o situaciones en que la mama queda muy
afectada emocionalmente, los de alrededor dicen casi siempre “tan nerviosa
estas que tu leche solo pude hacerle daño al chico”, y un medico mal informado
aconseja interrumpir la lactancia. Por el contrario, nosotros hemos observado,
que no solo al niño no le hace daño la leche de su madre, sino que esta se siente
mucho mas aliviada emocionalmente, mucho mas contenida, segura y tranquila al
poder seguir nutriéndose con el vinculo que le proporciona continuar
amamantando a su bebe.
Cuando el vínculo
entre la madre y el hijo es sano, el destete se favorece. La madre y el hijo
tienen capacidad de separarse porque estuvieron juntos en el momento preciso. El
consigo puede alejarse y avanzar en su desarrollo. Será por ello en el futuro,
un niño sanamente independiente. Es así como el amamantamiento en su culminación
es otro precursor de la libertad. Por lo tanto la elección del momento del
destete total debe ser un hecho libre, de la madre y del hijo.
La
licenciada Ana Maria Brusco, psicóloga, el Dr. Jorge W. Diaz Walker, pediatra, psicólogo
y medico y la Dra. Adriana
Foguelman, pediatra, son los que recopilaron los hechos del destete de las
madres de Ñuñu
Vicente López,
agosto 2012